ayuntamiento, clínica y centro de reuniones en Madarcos
Emilio Pemjean Muñoz, Carmen Martinez Arroyo, Rodrigo Pemjean Muñoz

Proyecto ganador en el II Premio de cubiertas de teja cerámica, convocado por Hispalyt.
Con esta pequeña intervención en Madarcos, mediante la sucesión de pequeñas plazas y recorridos, se ha creado un eje que articula el pueblo desde la plaza de la iglesia hasta la antigua fragua, completándose el tejido de la trama original. Se ha separado el programa que tenía que resolver el proyecto en dos edificios: la sala de reuniones, de uso esporádico, lúdico y cultural y el ayuntamiento y clínica, de uso permanente y cotidiano.
Se ha utilizado el material cerámico en la cubierta del ayuntamiento, pero con un compromiso estético, que sitúa el edificio en la época en que se ha construído.

El ayuntamiento-clínica de espacio horizontal, tiene una rotunda continuidad entre el interior y el exterior, con el pavimento de granito saliendo al patio para formar con los despachos interiores un único espacio. Esta idea de continuidad se ve reforzada por los elementos que salen al exterior, comolos muros y la caja de instalaciones en acero cor-ten. El empotrar en suelo y paredes la carpintería de vidrio hace que estos elementos de gran tamaño “desaparezcan” ayudando a mantener la continuidad espacial. En el interior, los elementos de separación entre ambos despachos permiten una visión conjunta de todo el espacio del edificio. Se han eliminado radiadores, incorporando un sistema de calefacción de agua por el suelo; del mismo modo, los armarios contienen cajas, cuadros eléctricos y demás mandos, para conseguir una visión clara del espacio sin elementos que la perturben.
Como contraposición al ayuntamiento, la sala de reuniones, es un espacio de luz vertical.

La sala adapta su sección a la topografía del terreno, en una geometría contrastada con la horizontalidad de la cubrición. La luz y la estructura están relacionadas según el mismo módulo. La “magia” de la luz reflejada hace “levitar” la cubierta. Los rayos de sol no se ven directamente, pero proyectan en los muros su “mancha” luminosa. Este mismo efecto de luz indirecta se consigue con la iluminación nocturna y artificial. El muro de piedra, conformador del volumen, aumentará su espesor en una de las fachadas hasta contener los espacios servidores y el muro blanco, objeto en el vacío de la sala, ocultará las puertas de dichos espacios. El muro del fondo de la sala será el único que siendo de piedra penetre como tal en el interior y frente a éste, en el lado opuesto de la sala, estará la gran puerta de guillotina de acero, lo cual permitirá que cuando ésta se encuentre abierta, se incorpore a la plaza de la iglesia para convertirse en un mismo espacio.
Se ha creado una pequeña y nueva plaza entre los dos edificios , en la que se sitúan las puertas del ayuntamiento (configurando) una caja de volumen penetrante de acero cor-ten, continuidad de la caja interior de archivos e instalaciones) y las puertas de la sala de reuniones (a modo de hueco “excavado en la piedra). La “grieta”, deja resbalar el silbido del viento para enmarcar el paisaje lejano.
Texto publicado por la revista NA con motivo del II Premio de cubiertas de teja cerámica, convocado por Hispalyt.